LA CALIDAD DEL AIRE EN ARQUITECTURA

CALIDAD DEL AIRE Y SUS CONTAMINANTES

¿Sabías que pasamos el 90% de nuestra vida en espacios interiores? ¿Sabías que el aire de estos espacios está de 2 a 5 veces más contaminado que el aire exterior? 

Es evidente que la calidad del aire de nuestros espacios interiores tiene un impacto directo en nuestro bienestar físico, mental y emocional y en nuestra capacidad de dar lo mejor de nosotros mismos. Es decir, afecta directamente su salud y bienestar. Por tanto, es uno de los aspectos más importantes de los edificios saludables.

La Organización Mundial de la Salud (OMS)  y la Agencia Norteamericana de Protección del Medio Ambiente (EPA) tienen establecidos los niveles máximos permitidos para los diversos contaminantes a partir de criterios basados en estudios epidemiológicos que muestran las relaciones entre las concentraciones de estos contaminantes, la duración de la exposición y los riesgos para la salud.

Estos contaminantes incluyen: 

1.- Gases orgánicos:

  • Formaldehido:
¿Qué es?

Es uno de los contaminantes del aire más comunes en interiores. Produce irritación de los tejidos cuando entra en contacto directo con éstos. Algunas personas son más sensibles que otras a los efectos del formaldehído. Los síntomas más comunes son irritación de los ojos, la nariz, la garganta y lagrimeo, lo que ocurre con concentraciones en el aire de aproximadamente 0.4-3 partes por millón (ppm)

El estandar WELL lo limita a 27 ppb (0.03 ppm). La OMS recomienda que los niveles de formaldehido en interiores no superen las 0,05 partes por millón. Estos valores recomendados pueden acumularse con relativa facilidad con la existencia de una única fuente. Los límites de exposición profesional en España establecen un valor límite ambiental de Exposición diaria de 0,3ppm.  Su uso no está prohibido, tan sólo regulado.

Evitando algunos materiales y tomando ciertas precauciones, puedes protegerte de ellos. Las personas más sensibles a este contaminante son los niños. Si quieres más información al respecto, puedes consultar en el siguiente link.

Recomendaciones para reducir al máximo su presencia en el hogar.
    • Lavar la ropa nueva, especialmente aquella resistente a las arrugas
    • Utilizar cosmética 100% natural, pues la cosmética química no está obligada a indicarlo en sus etiquetas con concentraciones por debajo de 0,05%.
    • Optar por muebles macizos. Si la economía no lo permite mejor laminados que aglomerados.
    • Productos de limpieza ecológicos
    • Ventilar la vivienda cada día
  • Compuestos Orgánicos Volátiles (COV):
¿Qué es?

Los compuestos orgánicos son sustancias químicas que contienen carbono y se encuentran en todos los elementos vivos. Los compuestos orgánicos volátiles, a veces llamados VOC (por sus siglas en inglés), o COV (por sus siglas en español), se convierten fácilmente en vapores o gases.

Según la Agencia norteamericana de Protección del Medio Ambiente (EPA), la presencia de estos elementos es entre dos y cinco veces superior en el interior de los edificios que al aire libre. Productos como disolventes, pinturas, limpiadores, líquidos para la industria de lavado en seco, insecticidas, ambientadores, pegamentos, barnices, soluciones fotográficas, tintas de fotocopiadoras o impresoras, y en general, cualquiera de origen petroquímico, pueden originar estos compuestos en hogares y lugares de trabajo.

No obstante, el origen de estas sustancias proviene también de fuentes naturales. El metano, el más abundante de los hidrocarburos atmosféricos, se forma a consecuencia de las deposiciones del ganado, las reacciones de putrefacción o la digestión de las termitas, aunque también proviene en gran parte de los procesos de combustión industriales (gas natural). Se sabe asimismo que el metano influye en el efecto invernadero y en las reacciones estratosféricas.

En España, hay en la actualidad dos Reales Decretos que controlan las emisiones de COVs. Por una parte, el Real Decreto 117/2003 se centra en la restricción de las emisiones de COVs debidas al uso de disolventes en determinadas actividades. Por otra parte, el Real Decreto 227/2006 limita el contenido de COVs en determinadas pinturas de decoración y productos para el repintado de vehículos. De esta manera, estas normativas prohíben superar ciertos límites de emisión en 20 actividades industriales concretas, que deberán colocar en sus productos un etiquetado indicando sus valores de emisión de COVs.

Recomendaciones para reducir al máximo su presencia en el hogar.

Es recomendable ventilar la vivienda cada día y usar las plantas como purificadoras de aire, pues ayudan a absorber los Compuestos Volátiles. También es importante fijarse en la etiqueta COV de pinturas. Una buena pintura no debería contener más de 1 g/l de COV.

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Calidad del aire

2.- Gases inorgánicos:

  • Monóxido de carbono (CO)
¿Qué es?

El monóxido de carbono se oxida y en su oxidación se produce dióxido de carbono (CO2), en exceso desplaza el oxigeno.

Se produce ahora está mas presente en nuestras casas puesto que éstas con cada vez más herméticas para ahorrar energía, pero esto dificulta la salida del CO2 generado por la respiración humana y la combustión en cocinas.

Recomendaciones para reducir al máximo su presencia en el hogar.

La renovación del aire interior es sumamente importante, además de reducir el CO2 e incrementar el oxígeno, permite la salida al exterior del formaldehido y los COV que desprenden las pinturas, mobiliario y productos de limpieza.

  • Ozono (O3)
¿Qué es?

El ozono es un constituyente natural del aire que respiramos. Es un gas altamente oxidante debido a la inestabilidad de su estructura molecular y tóxico a concentraciones elevadas. Puede tener efectos corrosivos sobre materiales y, a determinadas concentraciones, se manifiestan sobre la salud humana (irritación y afecciones del aparato respiratorio, con especial incidencia en grupos sensibles, niños, ancianos y personas con problemas respiratorios), en las comunidades vegetales (afectando al crecimiento y fisiología de la vegetación, causante de daños foliares, reducción de cosechas y producción de semillas, etc.); y en general sobre los materiales (potenciando los procesos de corrosión y envejecimiento).

En la estratosfera se encuentra capa de ozono u ozono estratosférico. Esta capa de ozono actúa de forma beneficiosa absorbiendo radiación UV proveniente del sol y evitando así que llegue a la superficie de la Tierra.

El ozono situado en la troposfera (mas cercano a la corteza terrestre) es lo que se denomina ozono troposférico. Este ozono, a causa de la acción del hombre, puede encontrarse en concentraciones superiores a las naturales, actuando entonces como un contaminante atmosférico por sus efectos nocivos sobre el medio.

Uno de los problemas de la gestión de la contaminación por ozono es su naturaleza de contaminante secundario, dado que no se emite directamente desde el foco de emisión, sino que se forma en el seno de la atmósfera a partir de otros compuestos primarios.

¿Qué efectos tiene?

Los principales efectos observados a concentraciones de 240 microgramos por metro cúbico son: tos, dolor de cabeza, laxitud y dolores pectorales al inspirar profundamente. También se detectan inflamaciones pulmonares, hiperactividad de las vías respiratorias y disminuciones importantes de la función pulmonar.

Para ello hay que tener en cuenta que en el interior de las casas la concentración de ozono suele ser del 50% a la que hay en el exterior. También que se dispersa con el viento y que los niveles más elevados durante el día se alcanzan habitualmente por la tarde y disminuyen al ponerse el sol.

Recomendaciones para reducir al máximo su presencia en el hogar.

Para mejorar la calidad del aire que respiramos en el interior de los edificios y conseguir así que sean más saludables y seguros para nuestra salud debemos saber cuando ventilar.

Las mejores horas son las más alejadas de las horas centrales del día, es decir,  de buena mañana y a última hora de la tarde. De esta forma evitaremos meter ozono dentro de casa y respirarlo, así como que se combine ya en el interior con formaldehido y otros ácidos orgánicos altamente irritantes.

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Calidad del aire

3.- Materia particulada:

Las partículas se clasifican según su tamaño, pueden tener cualquier forma y pueden ser sólidas o gotas líquidas.

Las partículas grandes miden entre 2,5 y 10 micrómetros (de 25 a 100 veces más delgados que un cabello humano).

Las partículas pequeñas son menores a 2,5 micrómetros (100 veces más delgadas que un cabello humano). Estas partículas son conocidas como PM2.5

Las administraciones públicas sólo informan del material particulado de tamaño más grueso PM10 (10 micras) y menos peligroso, pero la presencia de PM25 en el exterior es muy común. Sus fuentes principales son:

    • Combustión de vehículos diésel
    • Combustión de energía en fábricas y viviendas
    • Incendios forestales

4.- Gas radón:

El gas radón es un gas radiactivo que se produce de forma natural. Según la OMS es la segunda causa de muerte, después del tabaco, por cáncer de pulmón, a nivel mundial.

El radón se infiltra en las viviendas a través de las pequeñas fisuras, los poros del hormigón, las juntas de las tuberías de desagües y otras acometidas.

Existen mapas que nos permiten identificar las zonas geográficas mas sensibles a este gas. 

Recientemente nuestro Código Técnico de la Edificación, ha incluido este concepto en uno de sus Documentos Básicos.

Si quieres ampliar información al respecto, te invito a que leas el siguiente articulo de la OMS así como que visites la siguiente web. 

CÓMO MEJORAR LA CALIDAD DEL AIRE INTERIOR

Alcanzar el objetivo de limpiar el aire interior, requiere el esfuerzo conjunto de los profesionales y los usuarios del edificio para implementar los enfoques adecuados, tales como estrategias de control de emisiones, de modificación del comportamiento humano, el diseño de edificios pasivos y activos,etc.

Mejorando la calidad el aire interior de nuestros edificios, conseguiremos disminuir síntomas, que van desde dolores de cabeza, sequedad de garganta, irritación ocular y secreción nasal hasta ataques de asma, envenenamiento y cáncer. Incluso se ha demostrado que se puede disminuir el riesgo de enfermedades respiratorias y cardiovasculares, como asma, isquemia miocárdica, angina, presión arterial alta y enfermedades cardíacas. Podéis leer más al respecto en el siguiente enlace. 

Por lo tanto, es importante definir niveles de calidad del aire interior que minimicen el riesgo para la salud humana y la potencien.

Esperamos que os haya gustado 🙂

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¡¡Hasta la próxima!!

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